Nuestro logotipo cuenta la historia del maíz. Las manos representan el trabajo de selección realizado durante miles de años por los agricultores mexicanos para crear lo que ahora llamamos maíz, el cual se originó de una planta silvestre llamada teocintle. Esta selección por innumerables generaciones de agricultores en todo México no sólo ha dado maíz al mundo, sino que ha creado una gran variedad de colores, texturas, tamaños y sabores del maíz: 59 razas distintas preservadas por los agricultores dentro de las fronteras de México. Son esas, las manos de los agricultores mexicanos regalando el maíz al mundo.

El color rojo de la mazorca representa la singularidad y la protección. El rojo es un color excepcional y está de tal modo ligado a las culturas tradicionales que las variantes rojas suelen conservar sus nombres en las lenguas indígenas: como Belatove, una variante roja del maíz Bolita, que en Zapoteco significa el color de gusano de maguey; o Xitocle, una variante roja del maíz Chalqueño, que en náhuatl significa quemada por el fuego de los dioses.

El rojo es un color que se encuentra exclusivamente en el maíz nativo. Los agricultores indígenas utilizan mazorcas rojas para “solicitar” la protección del resto de la cosecha almacenada, ya que el maíz rojo tiene connotaciones de poderes especiales, a menudo utilizados en ceremonias religiosas y de sanación.

Decidimos utilizar este simbolismo en el logo para mostrar la intención de nuestra Marca Colectiva, de proteger los maíces nativos, protegiendo así el patrimonio cultural y natural ancestral legado de nuestras culturas mesoamericanas y elemento primordial de la identidad de México.

El propósito de la Marca Colectiva MILPAIZ, consiste en:

a) Que el mercado o consumidor identifique y distinga el producto de maíz y de los productos asociados a la milpa amparados bajo esta Marca Colectiva como productos nativos que han sido producidos por pequeños productores en áreas de distribución documentada, en forma tradicional y respetando sus valores culturales, y pueda reconocer su origen, calidad y características.

b) Garantizar que el producto de maíz y/o cultivo asociado a la milpa que será etiquetado bajo esta Marca Colectiva, corresponda a productos nativos que históricamente provienen de la región y han sido conservados y seleccionados por sus habitantes.

c) Que el producto cosechado de la milpa cuente con características de calidad consistentes y acordes a los estándares establecidos en estas Reglas de Uso y en los manuales técnicos para cada cultivo.

d) Que los pequeños productores que produjeron este maíz nativo y/o producto de la milpa siguen prácticas y métodos agrícolas que conservan los componentes tradicionales de la zona.

e) Que el consumidor de los productos amparados bajo esta Marca Colectiva identifique sus características de calidad y origen como una forma de reconocer la aportación de los pequeños productores y contribuir así a la conservación del maíz nativo y de la milpa, en beneficio social y económico de la familia y comunidad que lo produjo.

f) Promover la producción, conocimiento, apreciación, posicionamiento y uso de los maíces nativos y productos de la milpa en nichos de mercado especializados.

g) Promover la diversificación de productos derivados de maíz nativo y de las especies asociadas de la milpa, como una forma de valor agregado.

h) Que se generen mecanismos de reconocimiento de las denominaciones locales para los maíces nativos y productos de la milpa de cada región.