Ciudad de México. El maíz es el patrimonio biocultural más importante de México. Desde hace más de 9 mil años los agricultores han producido una gran variedad de razas (conocidas como maíces criollos o nativos) a partir del pequeño teocintle. Actualmente se conocen alrededor de 60 razas adaptadas cada una a la diversidad de condiciones del país. El maíz no se puede reproducir sin la intervención humana y es gracias a la continua selección y siembra de los campesinos y al consumo de estas razas que se ha mantenido esta gran diversidad a través de los siglos y continúa en el presente. Sin embargo, a pesar de su importancia en la alimentación y en la cultura, es difícil distinguir los productos de maíces nativos en el mercado y de apoyar por medio de las compras a los productores que conservan estas razas y otros productos de la milpa.

Es en este contexto que surge PROMAIZ NATIVO, Asociación Civil sin fines de lucro, que tiene por objetivo impulsar y ejecutar acciones para la conservación, rescate, transformación, valoración, promoción, divulgación y aprovechamiento sustentable del maíz nativo, así como de los cultivos y vegetales asociados a la milpa, tales como el frijol, el chile, el amaranto, las calabazas, el tomate y los quelites, entre otros.

¿Qué es el maíz nativo? Es aquel que se ha originado en México a partir de su domesticación y su diversificación adaptado a diferentes condiciones agroecológicas de México. Estos maíces tienen una larga historia de evolución y selección por generaciones de agricultores. Sus poblaciones mantienen un alto nivel de diversidad en las semillas guardadas aun dentro de la misma comunidad. Están adaptados a las condiciones ambientales prevalentes. Producen granos bajo condiciones adversas de baja fertilidad, suelos pobres y poca lluvia. Son importantes en la cocina y ceremonias locales.

Los maíces NO nativos son los que se diversificaron fuera de la república mexicana desde razas de maíz que se formaron en otras culturas foráneas, hasta los seleccionados por mejoradores profesionales en la creación de semillas híbridas. Entre estos extremos hay una gama de variedades de polinización abierta. Los “maíces mejorados” incluyen los maíces híbridos que han sido seleccionados para ser homogéneos en cuanto a su altura, tipo de grano y tiempo de floración y para ser plantados en mayor densidad y cosechados por maquinaria (granos duros, altura uniforme, y tallos fuertes). 

PROMAIZ NATIVO A.C. se formó en junio de 2017 como resultado de la iniciativa de productores, académicos provenientes de las más diversas disciplinas científicas, preocupados por rescatar y valorar las dietas variadas que proporcionan los sistemas agroecológicos tradicionales. La Asociación Civil ha contado desde sus inicios con el apoyo de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) y del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) por medio del Programa de Investigación CGIAR MAIZE (CGIAR Research Program MAIZE). Los actuales integrantes de PROMAIZ NATIVO y colaboradores de las instituciones antes mencionadas han organizado una serie de talleres dirigidos a fomentar un sistema para el beneficio de los pequeños productores tradicionales guardianes de la diversidad de maíces nativos de México que los vincule con un mercado de especialidad que valore su maíz. 

PROMAIZ NATIVO A.C., tiene entre sus objetivos apoyar proyectos que fomenten la valoración de los productos de la milpa de pequeños productores y de asociaciones cooperativas situados en las zonas con mayor pobreza y marginalidad. La intención es promover acciones de investigación, vinculación, difusión y fomento del consumo de los productos de la agrobiodiversidad mexicana y sus valores culturales asociados tales como la solidaridad, la cohesión social y el respeto a los métodos agroecológicos de producción de alimentos. Para tal efecto PROMAÍZ NATIVO A.C. se aboca a fomentar la organización e integración de mercados especializados de maíces nativos y de productos de la milpa buscando la autosuficiencia alimentaria de los productores, el arraigo al campo, la generación de ingresos y la dignificación de las condiciones de vida mediante la comercialización de excedentes bajo un esquema de justicia y ética en el trato entre productores y consumidores.

Otros objetivos que persigue la Asociación Civil son los siguientes:

  • Impulsar una marca colectiva, MILPAIZ, para lo cual se ha contado con la asesoría de Santamarina + Steta S. C., así como de otros signos distintivos que permitan identificar el maíz nativo y los productos de la milpa por sus características de origen y calidad, para proteger a los productores e impulsar la valoración de la conservación y aprovechamiento sustentable.
  • Favorecer la organización local para fortalecer los mecanismos de conservación, rescate y conocimiento tradicional del maíz y la milpa.
  • Diseñar sistemas de comunicación e información de disponibilidad y precios del maíz nativo dirigidos a los productores.
  • Establecer unidades de verificación, asesoramiento y estudio del maíz nativo que sirvan como herramienta para productores, compradores, distribuidores y consumidores en general.
  • Realizar talleres de capacitación por científicos expertos, miembros de ésta asociación.

Si tiene interés en participar en la conservación de los maíces nativos como productor, asociación o público en general puede contactarnos en la página Web: promaiznativo.org.mx

Nota para los editores:

Acerca del boletín de prensa y de PROMAIZ NATIVO A.C.

Flavio Aragón Cuevas, Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias

(INIFAP) f.aragon@promaiznativo.org.mx

Gerardo Torres Salcido, Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe, UNAM

g.torres@promaiznativo.org.mx

Edelmira Linares Mazarí, Instituto de Biología, UNAM

e.linares@promaiznativo.org.mx

Amanda Gálvez Mariscal, Departamento de Alimentos y Biotecnología, de la Facultad de Química, UNAM

a.galvez@promaiznativo.org.mx